Derecho a la igualdad de hombres y mujeres
La forma más exacta de medir la calidad de una sociedad es su concepto de los derechos humanos inalienables y sobre todo, el respeto de los poderes a esos derechos. Cuando más se garanticen y respeten en la vida real esos derechos, más se avanzará en Libertad, y Justicia.
En la Declaración Universal de Derechos Humanos aprobada el día 10 de diciembre de 1948 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, se establece:
"La presente Declaración Universal de Derechos Humanos como ideal común por el que todos los pueblos y naciones deben esforzarse, a fin de que tanto los individuos como las instituciones, inspirándose constantemente en ella, promuevan, mediante la enseñanza y la educación, el respeto a estos derechos y libertades y aseguran, por medidas progresivas de carácter nacional e internacional, su reconocimiento y aplicación universales y efectivos, tanto entre los pueblos de los estados Miembros como entre los de los territorios colocados bajo su jurisdicción."
En el Artículo 1 se recoge: "Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos."
En el Artículo 2 se especifica:
"1. Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índoles, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición."
En el Artículo 3 se aclara: "Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona."
En el Artículo 26 afirma: "Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivos.
2. La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos; y promoverá el desarrollo de las actividades de la Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz.
3. Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos."
Igualdad ante la Ley no es igualdad ante la vida, porque se pueden establecer mil leyes y no llevarlas a la práctica. Pero para avanzar en esa igualdad es necesario el ordenamiento jurídico tanto de carácter nacional como internacional, es decir, para evitar las discriminaciones, estas deben ser reconocidas y legislar contra esa discriminación, y así se podrá avanzar para conseguir la igualdad real en la vida de las niñas y las mujeres.
En el artículo 14 de la Constitución Española dispone: "Los españoles son iguales ante la Ley, sin que pueda prevalecer discriminaciones algunas por razón de nacimiento, raza, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social"
Este artículo de la Constitución Española está desarrollado en la L.O.E. (2006) potenciando la igualdad de sexos, introduciendo entre los objetivos esta igualdad, y promocionando la igualdad de oportunidades.
Entre una de la finalidades de esta Ley se afirma: " La formación en el respeto de los derechos y libertades fundamentales y de la igualdad entre hombres y mujeres, en el ejercicio de la tolerancia y de la libertad dentro de los principios democráticos de convivencia y en la prevención de conflictos y la resolución pacífica de los mismos."
Entre las distintas formas de discriminaciones, se sitúa en uno de los lugares preferentes, la discriminación según sexo; por eso esta Ley insiste en la formación de actitudes y conductas que erradiquen estos prejuicios existentes.
La Ley Integral contra la violencia de género deja claro las medidas de protección a las victimas y en las consecuencias que para los hijos e hijas de éstas se derivan, pero en el ámbito educativo se queda un poco corta.
Se debe explicar como se va a tratar la violencia en el currículo, en la formación y en la planificación de las medidas preventivas. Se deberá abordar este tema en el desarrollo de la Ley de Educación. Nadie duda que la violencia de género esté relacionada con el sexismo y que la familia sea un eje de aprendizaje de estas actitudes sexistas que llevan a la violencia. No podemos ignorar este tema ni considerarlo como algo que no nos afecta, ni realizar acciones puntuales en días señalados, o en alguna hora de tutoría. Es necesario crear programas integrales donde se analice el sexismo imperante en la sociedad para sensibilizar a la comunidad educativa partir de los Derechos Humanos y avanzar en la cultura de la Paz.
Analizando los Derechos de las Mujeres en la Constitución Europea, se observa un rechazo a la incorporación de los aspectos de género en ella y a una perpetuación de las ideas dominantes.
Para educar en la Igualdad se debe conocer las creencias previas del concepto que el alumnado tiene sobre la Igualdad de Hombres y Mujeres, y a partir de esas ideas asumidas, establecer programas que fortalezcan, y aseguren las ideas positivas, o cambien, derriben, o sustituyan las ideas preconcebidas sobre desigualdad entre ambos géneros.
Toda metodología actual se basa en comprender la situación del alumnado, en las ideas previas aportadas, y sobre ellas, trabajar los conocimientos programados.
Para trabajar sobre actitudes y conducta, potenciar los valores, es imprescindible conocer si el alumnado de la Comunidad Autónoma de Murcia, tiene estereotipos de género, qué clase y que ideas aporta, y, actualmente, no existe ningún trabajo que nos garantice estas ideas. Sólo conociendo qué piensan, qué creen, y cómo actúan, se podrá establecer un currículo explicito, que elimine las discriminaciones existentes.
Al ser la enseñanza obligatoria hasta los 16 años, todos los ciudadanos y todas las ciudadanas de España tienen un espacio temporal para adquirir este concepto y cambiar las discriminaciones actuales de la sociedad. El hecho de la obligatoriedad de la enseñanza hasta la edad de los 16 años, hace a la escuela el ámbito privilegiado para educar en actitudes no sexistas a todas las personas del país, y enseñar la Igualdad tan deseada entre ambos sexos.
El potenciar la igualdad entre ambos sexos, evitaría muchas situaciones de violencia de género y muertes. Muchas situaciones de violencia de género tienen su origen en considerar a la mujer como propiedad del hombre, casi sin derechos. Y esto no sucede sólo en ámbitos deprimidos económicamente o culturalmente, sino en todos los ambientes, porque las ideas de la sociedad patriarcal y andrógena no ha hecho distinción de clases.
Tengo otro blog: El mosaico educativo blogspot.com
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sahara rdz -